OFRECEMOS UN CASERÍO RUSTICO TÍPICO INDEPENDIENTE ENTORNO DE 3.000 m2 DE VERDE, con PISCINA, BARCHESSA, PISO DEL CUIDADOR así como TERRENO AGRÍCOLA de 21.670 m2.
El caserío se compone de casa principal, con puerta muerta, antiguo establo y pajar encima, todo ello rodeado de 2 alas de grandes porches.
La gran barchessa se utiliza como cobertizo de herramientas/almacén y piso del cuidador de 113 m2.
La casa solariega, de 270 m2, tiene 3 plantas y se compone de la siguiente manera:
Planta baja: entrada al gran salón, cocina y cuarto de baño del salón. Una cómoda escalera de madera en voladizo comunica las plantas superiores.
1ª planta, utilizada como zona de noche, compuesta por dos dormitorios dobles, cada uno con cuarto de baño privado.
2ª planta abuhardillada, utilizada actualmente como zona de noche, compuesta por 2 dormitorios, uno doble y otro individual y un pequeño cuarto de baño.
Antiguo granero, de unos 120 m2, con techos abovedados originales y columnatas de piedra, para restaurar y utilizar como almacén.
Antiguo granero de 120 m2, situado encima del granero, completamente renovado, conectado interiormente a la casa principal y exteriormente con otra escalera, se destina a gran sala de estar de espacio abierto.
Los pórticos se abren a la piscina y dan a una avenida arbolada que se adentra en el parque del Taro.
Los 21.670 metros cuadrados de terreno agrícola, cuestan 95.000,00 euros, además del precio del compendio inmobiliario.
PARMA SUD, COLLECCHIO, inmerso en un oasis de verdor, paz y tranquilidad, adyacente al “Parque Fluvial del Taro“, le proponemos magníficos inmuebles.
“En la floreciente campiña que se adentra en el Parque Fluvial del Taro, entre senderos de agua que discurren junto a carriles reservados, se llega a un exclusivo reino inmerso en la naturaleza.
Rodeada por más de veinte mil metros cuadrados de terreno y abrazada por su patio de edificios, se alza la villa principal con sus numerosas ventanas que dan a una rica variedad de flores.
La torreta blanca destaca en el tejado entre los colores de la mampostería subyacente de piedra listata. Dos grandes pórticos exteriores en lados opuestos ofrecen zonas de confort que enmarcan el panorama como una obra de arte.
La residencia está impregnada de un alma creativa atestiguada por los numerosos detalles y mobiliario que trazan su originalidad e historia, abrazando espacios de moda, convivencia, trabajo y entretenimiento. La madera y la cerámica se alternan armonizando las estancias en todos los niveles. El ambiente especial y evocador ofrece una experiencia clara y fresca de elegante sencillez.
El antiguo granero ha conservado su suelo original, las bóvedas del techo y los pilares que las sostienen.
El antiguo granero ofrece una perfección escénica de equilibrio en un juego de referencias entre la madera del suelo y el techo sostenida por la imponente cercha, y el color claro de las paredes amplificado por las numerosas aberturas de luz al exterior. El amplio entorno combina la hospitalidad del volumen con la intimidad del pensamiento creativo.
Los espacios exteriores reservan sorpresas y presencias que atestiguan el carácter de esta vivienda nunca previsible en la que cada objeto ocupa el lugar que le corresponde. Como el característico pavimento que conduce a la piscina y el pavimento frente a la construcción exterior de piedra y ladrillo utilizada como cocina: ambos trazan la invitación a la relajación al aire libre.
Ánforas de terracota que descansan sobre grandes pedestales, estatuas alojadas en nichos o recostadas en la vegetación, una estructura para canalizar el flujo de agua que recuerda a las fuentes romanas, un muro con una ventana que delimita la frontera entre el patio y el parque, como una invitación a ir más allá con la mirada y la imaginación: este mundo forma parte de una vivienda que transmite una forma de vida centrada en la belleza y el bienestar que proporciona la inmersión en el arte de la naturaleza.“
Maria Cristina Bonati